miércoles, 14 de diciembre de 2016

Eloisa Espuma "Sin Titulo y casi que Sin Autor"

Estaba ella, olfateando todas las flores regadas a las afueras del cementerio, las flores que los vendedores desechaban por que ya estaban marchitas tal vez tan marchitas como la propia ropa de Eloísa… Pisoteaba algunas rosas que no eran de olor tan agradable y chupaba el polen de otras que no estaban tan bonitas, eran las 5:27 de la tarde, Dante llego y entraron al cementerio, mientras caminaban por algunos pasillos cantaban canciones de  Ana y Jaime; se acercaron a una tumba rodeada de moscos y empezaron a escupir sobre está diciéndose entre ellos “si se murió fue por que no era muy bueno” “si se murió era porque era bueno” “hierba mala nunca muere, ¡era bueno!”. Después de esto salieron corriendo por el cementerio, tumbaron algunas flores mientras fumaban y cantaban con voz muy fuerte CAFÉ Y PETROLEO, hasta quedar al final como de costumbre tostados, tirados sobre la gramilla, como si fuesen dos muertos enamorados. Se les había convertido en parche leer y tomar pola al lado de la tumba de Gardel o cualquiera de esas fosas gigantes con hermosas esculturas, mientras detallaban esa preciosa obra de arte, Eloísa se iba poniendo en forma de la misma estatua que admiraba pero en vez de hacer la cara mártir de aquella obra, empezó a tentar a Dante con una serie de gestos sensuales que no lo dejaron contener y lo hicieron actuar como una bestia salvaje, se desfogo en pasión con mucha energía, Eloísa estaba entre sus brazos, él no lo podía creer pero entre pálpitos, tragos de cerveza y un lugar lúgubre, hicieron el amor sin importar el tiempo, sin importar el lugar, recostaron sus cuerpos desnudos sobre la tumba de Francisco Nuñez “fecha muerte 24 de mayo del 46”; después de semejante acto delicioso, se fueron a la universidad que estaba algo cerca del cementerio, se encontraron con Pipe, el novio de Eloísa y como cosa que acostumbraban hacer, se besaron exageradamente, babeaba a Eloisa como si estuviera marcando territorio.

Después de clase Dante se encontró nuevamente con Pipe, y este le dijo que Eloísa ya le había contado lo de la “conexión” en el cementerio, yo pensé que se le iba a lanzar en sima a matarlo, pero a cambio de eso recibió otra de esas propuestas sexuales, que para decir verdad, yo de cierta forma estaba esperando, por que por alguna razón sabía que en algún momento ellos iba a lograr tener mi tan esperado y mágico trio sexual… Dante, Pipe y Eloísa, ¡Fantástico!.

Dante le dijo que sí, y después de eso solo gemidos sensuales y bruscos que salían de un auditorio de la universidad, en el cual para el colmo estaban presentando El Imperio de los Sentidos como cómplice; lo hicieron varias veces, se deleitaron tantas veces como mi vista lejana lo hizo, de amaron, se desfogaron pero no fue infinito, a Pipe sus papas políticos encorbatados, se lo llevaron para otra ciudad como si se hubiera enterado que su hijo estaba en su mejor momento, Eloisa se perdió, el telefono nunca contesto, su aroma a la universidad tampoco volvió; se suponía que Dante era el que mas sabia de ella, pero no sabia nada. Tal vez estaba Eloisa en algún vuelo infinito por alguna droga, ay Eloisa Espuma, ¡sera que moriste de una sobredosis?
Dante por su parte estaba entendiendo un poco más el concepto del desapego porque era necesario, muchas personas entraban y salían de su visa, algunas por la puerta grande y otros por la mas chica, algunas dejando recuerdos dulces y otros mas amargos, pero algo si dejaban todos, a Dante la experiencia y a mi... Una historia que contar.